Las Narcohermanas

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Una investigación de dos periodistas españoles, pone al descubierto la vinculación del narcotráfico con el gobierno de Fidel Castro . . .


 

  Acaba de agotarse en España, la tercera edición de “Conexión Habana”, (editorial “Temas de hoy”, 2005) un muy documentado reportaje de los periodistas Santiago Botello y Mauricio Angulo. El libro, es un resumen del programa “Narcotráfico en La Habana”, transmitido en España, por “Telecinco” y en Miami, por “Univisión”, en esta última, con sintonía absoluta.

Antes de levantar inventario de algunos detalles de “Conexión Habana”, el cronista desea hacer alguna advertencia preliminar. Los venezolanos, no debemos transferir a los casi 100.000 enviados a nuestro país por el régimen gamberro de Fidel Castro, la indignación que nos producen investigaciones como las de Botello y Angulo. Es cierto. Existe un considerable número de integrantes del tenebroso G-2, llegados a Venezuela. Verdaderos sicarios que vienen a cumplir labores represivas o de diseño y práctica de guerra sucia, mimetizadas en las llamadas salas situacionales.

 

Pero ni la mayoría de los trabajadores venidos de Cuba son unos matones, ni tampoco culpables de los desmanes de sus gobernantes. Cuando la sedicente revolución bolivariana implosione - lo que ocurrirá, más temprano de lo que piensan sus gorreros - estaremos obligados a prestarle ayuda a ese grupo de hombres y mujeres que sufren, aquí, en este instante, un régimen de semiesclavitud impuesto y monitoreado desde La Habana.

LA REVOLUCION PROXENETA. El principal mérito de “Narcotráfico en La Habana” y de “Conexión Habana” es que desenmascaran, videos y testimoniales en mano, los vínculos de Castro con la droga.

La violación sistemática de los derechos humanos del gobierno de este último, la depauperación del pueblo, la farsa del cacareado sistema de salud pública, las consejas del lavado de dinero negro producto de delitos perpetrados por subversivos latinoamericanos, así como la explotación por el funcionariado revolucionario del lucrativo negocio de las jineteras, que le ha valido el remoquete de “Revolución Proxeneta”, era algo que lo sabíamos todos, pero que además, ya estaba documentado. 

Sin embargo, la participación de la llamada revolución del 26 de julio en el tráfico de estupefacientes, permanecía en zona nebulosa. Ahora, comienzan a calzar las piezas del rompecabezas. Un informe de la ONU, afirma que el 85% de la cocaína que ingresa en Europa, lo hace a  través de Cuba, en ruta que comienza en Ecuador o en Colombia, termina en Madrid o en Milán, previo tránsito a través de La Habana. Por si fuese poco, desde julio de 2004, permanece abierta una investigación sobre el origen de los 3.900 millones depositados, en efectivo, por el régimen de Fidel Castro en el banco UBS de Zurich. Un descomunal capital inmovilizado, mientras los cubanos de a pie mueren, literalmente, de mengua. 

Botello y Angulo lograron infiltrarse en el submundo de la distribución de narcóticos en la isla. Antes, en España, habían efectuado contactos que les facilitaron el acceso a los mafiosos internacionales que operan en La Habana, con libertad absoluta. Por supuesto, los videos que apoyan sus investigaciones, no incluyen ninguna toma de Fidel Castro, negociando alijos de cocaína, ni cerrando tratos personalmente con los lords de la droga. Pero constituyen evidencias, demoledoras contra este último.  

¿Cómo burlan las mafias locales de narcotraficantes, los rigurosos controles en aeropuertos y puertos de Cuba?

Los testimonios recogidos por este par de periodistas, no dejan margen de error. Para el tonelaje de drogas, en particular de cocaína,  que entra y sale de la isla no existe celo aduanero de ninguna especie. Circulan a su aire y uno puede oír y ver en los mencionados videos, las declaraciones de los traficantes demostrando su valimiento con las altas autoridades revolucionarias.

APARECE LA REVOLUCION FORAJIDA Y BOLIVARIANA. Cuando Botello y Angulo regresan a España, su superior inmediato les hace una crítica demoledora. No incluyeron en el trabajo, la versión del gobierno cubano. Botello vuelve a La Habana. Notifica al gobierno cubano del contenido de los videos y le concede el derecho de réplica. Resultado: silencio absoluto y represión brutal contra los supuestos colaboradores de los periodistas en la isla. Pero a los verdaderos traficantes denunciados en las cintas, ni con el pétalo de una rosa.

“Conexión Habana”, porque no podía faltar, incluye referencia a la vinculación del narcotráfico cubano con Venezuela. Pero el cronista lo deja hasta aquí. Por este lunes, quiero darle un descanso a nuestra revolución forajida y desvergonzada. Tampoco quiero que piense que la tengo tomada con ella, la pobre.

 


© 2005 Derechos Reservados - Dr. Omar Estacio