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No es fácil el gesto generoso en el ámbito de este
tipo de aspiraciones. En alguna oportunidad el cronista pensó que unas
primarias de la oposición, constituían un buen mecanismo para escoger el
abanderado contra el gobierno gamberro de Chávez. Pero no. He aquí, que
hombres bien formados, exitosos, si se quiere, en la gestión de sus
respectivas regiones, encuentran dificultades insalvables en lo que se
relaciona con el desprendimiento personal, aunque sea por cuentagotas.
La antropofagia altruista. En relación con el
sacrificio en aras de intereses superiores, les ofrezco este lunes un
episodio de canibalismo muy particular. No es de carácter político,
dicho sea de paso. Fue un incidente de antropofagia altruista en alta mar.
En el punto más aislado del Pacífico, sin radiotransmisor, luces de
bengala, ni ningún otro elemento para enviar un SOS. El relato va a
gustarle a Borges, al "Negro" Cova, a Fermín, a Ledezma,
Mendoza, Peña, Ramos, Salas, - ¡estricto orden alfabético! - y a los 25
millones de venezolanos que no menciono por razones de espacio, pero que
también se sienten precandidatos.
Unos pasajeros a la deriva, votan por comerse entre
sí. El trasatlántico se había hundido, la balsa salvavidas donde
navegaban no tenía alimentos, así que luego de dos semanas de
deliberaciones, concluyen que la única posibilidad de no morir de hambre
es el canibalismo. Sin embargo llega la hora de confeccionar el menú y
surgen nuevas disquisiciones ¿quiénes iban a ser los primeros devorados,
para que los restantes náufragos sobreviviesen?
- ¡Primero las damas! - exclamó uno de los
avispados de siempre.
Pero estamos en 2003. Más allá de las
profundidades marinas, donde se tome cualquier decisión contra el llamado
sexo débil se encuentra condenada al motín de algún grupo feminista,
siempre recalcitrante. Propuesta derrotada.
- Entonces - sugirió un muchacho - de sexagenarios
para arriba. Al final, tienen menos expectativas de vida.
Pero los ancianos exigieron ¡respeto !
Los menores de 30 años, también presentaron su
alegato: eran los tripulantes con mayor fortaleza física y por
consiguiente incomibles, por ofrecer garantías de remar hasta puerto
seguro. De todas maneras no faltó la frase, insoportable por bobalicona,
cuando quien la esgrime es un propio afectado, con su característico
sonsonete: "Es que los jóvenes somos el futuro de la patria
¿Ves? ".
Los gordos, argumentaron que ellos eran quienes
tenían mayor grasa y que por lo mismo, eran los más autosuficientes para
vivir por sí solos sin necesidad de alimentos. Los flacos, advirtieron
que contenían pocas calorías. Los norteamericanos, se aprovecharon de su
ganada fama de insípidos, tipo Jimmy Carter, y los hispanos, recordaron
las posturas racistas del U.S.Inmigration Service:
- ¿No somos unos desordenados? Entonces quienes nos
devoren corren el riesgo de contaminarse y naufragar a causa del primer
bonche que monten en esta lancha.
La discusión descendió al sórdido mundo de la
política.
- Los pasajeros VIP somos menos numerosos - argumentó
la llamada "Contra"- Si nos comemos a los de gallinero, habrá
más alimento y aumentará la probabilidad de que alguien pueda echar el
cuento.
Motín a bordo, encabezado por un dirigente de
izquierda que, como siempre, viajaba de golilla:
- ¿No son los primeros en todo? Entonces los
oligarcas, tienen que ser los primeros en sacrificarse - y esgrimió un
cuchillo de cocina.
Nuevo motín a bordo.
Las infructuosas disquisiciones. No es fácil el
desprendimiento personal. Peor cuando se refiere a las ansias de Poder.
Los que anhelamos que después del 18 de agosto, la Republiqueta
Bolivariana no sea más que un recuerdo, nos llevamos las manos a la
cabeza ante el escaso espíritu de sacrificio de la dirigencia de
oposición. Ahondaré sobre el tema, pero por ahora, tengo que concluir el
relato.
Unas hienas marinas que estaban al asecho, se dieron
un verdadero banquete cuando un volcamiento de la balsa acabó con las
infructuosas disquisiciones. Es que cierta fauna salvaje, forajida y
violenta, sí que no discurre a la hora del canibalismo, político o en
altamar. Con el perdón de los mencionados animalillos por la
comparación, hoy que tenía el propósito de dedicársela, solamente, a
la dirigencia de la oposición.
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